sábado, 12 de septiembre de 2015

El ocaso de Super Vela.

Hace algunos años, en la época de colegio, cierto amigo llamado José me presentó a un nuevo compañero que resultó ser mi tocayo*. Ya había notado su presencia pues era el único de piel negra en el salón y llegaba tarde casi todos los días por vivir en un distrito algo lejano. Era muy inteligente y con buen sentido del humo; entre sus aficiones estaba el de hacer caricaturas, inicialmente dibujaba a nuestro amigo en común comiendo ballenas -aludiendo a su voraz apetito-. En poco tiempo llegamos a ser buenos amigos, podíamos hablar de muchas cosas y entre los temas que tocábamos estaba el comportamiento de los profesores con los alumnos.

 No recuerdo bien como, pero en algún momento empezamos a dibujar historias en las que los profesores se convirtieron en los protagonistas; los cuales eran llamados por sus apellidos o por apodos que ya tenía o que se acomodaban a su manera de ser. Los profesores buenos y comprensivos eran los héroes mientras los malos y agresivos eran los villanos en una lucha constante por el bien o mal de los alumnos(el parangón del pueblo indefenso). Entre los personajes destacaban el malignísimo "Moncho", "Rojas", "Fantomas", "Ninamango" y nuestro tutor: el gran héroe "Super Vela". Posteriormente también incluimos a algunos pocos compañeros como personajes. Cuando terminábamos con alguna caricatura, esta iba de mano en mano por el salón. Las historias seguían algunos sucesos de lo que ocurría en el colegio -desde nuestro infantil punto de vista- y luego se fueron integrando algunos compañeros al grupo, algunos con pocos aportes y otros con una copiosa producción(no siempre difundida en clase). Llegó el momento de ponerle nombre al grupo y como analizábamos de alguna manera la realidad de nuestro colegio Santa Rita, decidimos ponerle por nombre un acrónimo: ASA (Asociación de SantaRiteólogos Anónimos) y con el nombre de la asociación firmábamos las caricaturas.

 Después de cierto tiempo, la fama de nuestra afición llegó al oído de los profesores y cierto día el tutor("Super Vela") decidió hablar, en plena clase, de nuestro grupo. Comentó que cierto grupo de alumnos se dedicaban a perder el tiempo en tonterías y que hasta habían formado una asociación a la que llamó asociación de "sonsos" anónimos, siguió su discurso con agresividad y con comentarios humillantes. Nunca esperamos tanta dureza de quien habíamos considerado tan buen profesor; quedamos muy avergonzados y sorprendidos y disminuyó nuestro interés por seguir. No pasó mucho tiempo para que el grupo se disolviera poco a poco y luego por otros problemas, incluso se perdió la amistad entre algunos integrantes del grupo. Particularmente entre mis aficiones posteriores no estuvo incluida el dibujo.

 Después de varios años, al recordar este penoso episodio veo un ejemplo de nuestra auto-condenación a la mediocridad. Con lo difícil que es motivar a un puber o adolescente por cualquier cosa. Si este profesor no hubiera sido tan mediocre y hubiera visto el potencial que llevábamos, quien sabe si hubiéramos podido llegar a ser grandes caricaturistas como Quino(¿Por que no?). Nunca lo sabré, pero de esta historia me llevo la tarea de valorar las aficiones que no entiendo, buscarles un valor y ayudar a quien me toque a darse valor, corregirse y esforzarse en aquella realidad que le atrae. Espero lograrlo para darle un final feliz a este recuerdo.

martes, 21 de mayo de 2013

Mañana pesada

Tal vez sea malo sentirse negativo, pero algo muy grave y evitable hasta cierto punto es difundir esta negatividad. Por algunas razones veo mi mundo un poco pesado, pero ¿que necesidad hay de apesadumbrar el mundo real?

miércoles, 27 de febrero de 2008

Cambio....

Cambio....

miércoles, 4 de julio de 2007

El holocausto después de masa

Resulta que el cadaver solo reviviría si todos los hombres del mundo le suplicaran, pero como había varios que no querían ir donde el cadaver, entonces los que se creían más parientes del difunto pensaron: " si los matamos, entonces los hombres que queden serán todos los hombres del mundo y así el cadaver revivirá".

La blanquita y el negrito

Su llegada fue en aquel tiempo un signo de esperanza, y no tardó en ganarse a todos en la casa, al poco tiempo lo considerábamos parte de la familia, queríamos que nos obedeciera pero entiendase que era a mi padrastro a quien le debía obediencia, cuando el se iba recién podía dedicarse a nosotros , sus ocurrencias eran tales que uno podía quedarse con él todo el día, realmente no era muy inteligente (salvo algunas veces), a veces decía cada estupidez y en ocasiones uno era conciente de lo inutil que se volvía el tiempo a su lado, pero todo se lo perodonábamos , era tan entretenido....

Ella llegó después marcando otro hito en la historia de la familia, nos encariñamos también rápido con ella, era diferente del negrito en muchas cosas, era inteligente, y aúnque no a todos la entendían ni sabían como tratar con ella, le guardaban solemne respeto, por ello generalmente no todos estábamos pendientes de ella a la vez sino que le dedicaba el tiempo a cada uno a la vez (por lo general), estropeamos su estadía volviendola superficial, haciendo que sus apitudes las invirtiera en cosas futiles, aún así nos ayudaba a aprender cosas sobretodo a mi hermanito, y como con el negrito era dificila calcular el bien o mal causado por su compañía.

Ahi estaban, eran los engreidos de todos, la blanquita y el negrito; por desgracia muchas veces se les podía considerar "la alegría del hogar", con el cariño que les teníamos no nos dábamos cuenta o no queríamos darnos cuenta de todo lo que nos habían robado, de lo dañinos que podían ser dada nuestra mediocridad en aquellos tiempos.

Años después ellos se quedaron con el negrito (no me extraña), y yo me llevé a la blanquita que desdichada en un día trágico acabó en malas manos, su paradero ignoro y ya no guardo esperanza de verla nunca más. A mi familia nunca les conté de su terrible destino y hasta ahora me preguntan por ella, pidiendome que alguna vez la lleve a visitarlos, en un buen momento y con calma espero contarles la noticia.

¿De donde vienen las mujeres bellas?

Porqué hay así algunas escogidas, que desesperante es encontrarlas en la vida, en contados momentos que aunque a veces siendo muchos nunca son suficientes.

En que luna fueron concebidas, a que estrella encomendose su madre, que música la deleitó en el vientre?

Que luz tan extraña emanan, porqué perfuman tanto el aire, su imagen llega al alma antes que a los ojos, los cuales pobres , no extrañarían nunca el refrescar de las párpados si pudieran verlas por siempre.

porque aún más intrigante, es porqué no hay mujeres bellas, sino aquella mujer bella

no puedo imaginar mujeres bellas, sino aquella mujer bella y ella es a la que busco

sábado, 23 de junio de 2007

¡Que tal concha!

Recuerdo cuando en plena clase traté de recordar a un profesor(*) un tema que dejo pendiente la clase anterior, el tema yo lo había confundido y un compañero se acomidió recordarle mejor; era acerca de la mención que hizo en cierta clase de Macchu picchu y que sus alumnos rieron cuando lo pronunció, el tema así, eran las lisuras:
Después de comentar dicha anécdota comentó otra en la que una hermana suya en Venezuela escribió una carta en la que entre otras cosas decía que estaba fascinada por los pinchos y que se comía uno todos los días, la familia se escandalizó con la carta, hubo quien comentó (se daba a entender que lo leyeron varios a la vez) "como se ha maleado esta chica" pero luego al final de la misiva aclaraba que los pinchos son aperitivos parecidos al anticucho peruano.
El tema se siguió desarrollando en base a la semántica de las palabras, eran lisuras según el lugar y el significado dado, luego siguió comentando las distintas lisuras que usábamos contando significados , algunas anécdotas y comentarios personales sobre ellas tratando en lo posible de denotarlas de vulgares y absurdas, vimos así el famoso carajo que fue redimido entre otras cosas porque su uso denotaba emoción y porque fue pronunciado por Juan Velazco Alvarado en sus discursos ¡Viva el Perú Carajo!, no me acuerdo que dijo de la famosa palabra mierda, Concha de tu madre era absurdo pues las mujeres no tenían concha, hijo de puta era cobardía e infame pues era muy vil insultar a la madre de alguien, huevón significaba sonso, etc y muchos etcéteras . Captó toda nuestra atención pues ningún otro profesor se arriesgaba a hablarnos de estas cosas, terminó la clase y todos encantados, en los siguientes días se vieron algunos resultados de la clase, mis compañeros pronunciaban más lisuras y algunos resultaban un poco decepcionados de la confrontación que hacían con el uso de ellas, alcancé a escuchar cuando un alumno de otra clase dijo conch.. a un amigo y este le replicó ¿acaso las mujeres tiene concha?, la respuesta obvia ¡claro que si!, después de unos días el profesor nos increó el uso que hacíamos de las lisuras tras la clase (esta vez sin argumentos más que un regaño), con lo que calmó algo el asunto pero todo quedo allí, quedando más confundidos acaso con el tema....
Años después una amiga me hizo un comentario acerca de la clase y me hizo la pregunta ¿acaso las mujeres tenemos concha?, respondí solo en pensamiento "pues.. si", ya tenía más conciencia y sabía que cuando se dice concha en modo vulgar se hace referencia a la vulva, estamos en Perú.....
Otros añitos más y en la academia bromenado con un amigo de ser confianzudo, le dije ¡Que tal concha!, lo que ocasiono la impresión y burla de mis compañeros pues me tenían por muy tranquilo, la bulla era exagerada pues hacía referencia a su descaro era justo pues estamos en Perú....
Más y más años y en el descanso del trabajo tratamos con un compañero el tema de las lisuras, decía que las lisuras no son de por sí groserías y de estas últimas si debíamos de cuidarnos decirlas y/o recibirlas , las lisuras se podían usar con prudencia sin que indicara ignorancia o vulgaridad, repetía su padre: "se que mis hijos hablan lisuras y lo considero de lo más normal, pero ¡ay que las pronuncien en casa!".

Continuara.....

(*) Este profesor nos impresionaba en sobremanera por la pasión e intención que tenía de educar su experiencia me ayudó a comprender que con la pura voluntad no basta para ello.